En la hermosa isla de La Graciosa, se encuentra un verdadero tesoro natural: la Playa de la Francesa. En este artículo, te llevaré a descubrir este rincón paradisíaco y te contaré todo lo que necesitas saber para disfrutar al máximo de tu visita.
¿Dónde está Playa de la Francesa (La Graciosa)?
La Playa de la Francesa se encuentra en la costa norte de la isla de La Graciosa. Esta pequeña isla, situada al norte de Lanzarote.
¿Cómo llegar?
Para llegar a la Playa de la Francesa, toma un ferry desde Órzola, Lanzarote, hasta Caleta de Sebo, La Graciosa. Desde allí, puedes caminar 45 minutos o alquilar una bicicleta o vehículo todo terreno. En La Graciosa no hay carreteras asfaltadas, así que es recomendable usar vehículos adecuados para caminos de tierra.
¿Qué ver en Playa de la Francesa (La Graciosa)?
La Playa de la Francesa es un paraíso de aguas cristalinas y arena dorada, conocida por su arrecife de coral que la hace perfecta para practicar snorkel y buceo. Además de disfrutar del sol y el mar, ofrece la oportunidad de explorar calas y acantilados impresionantes en sus alrededores.
¿Por qué visitar Playa de la Francesa (La Graciosa)?
Visitar la Playa de la Francesa es una experiencia que no te puedes perder durante tu viaje a La Graciosa. Además de su belleza natural, esta playa ofrece un ambiente tranquilo y relajado, perfecto para desconectar y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro. Al visitar la Playa de la Francesa, también estarás contribuyendo a la conservación del medio ambiente. La isla de La Graciosa es un espacio protegido y es importante respetar y cuidar su ecosistema frágil. Recuerda llevar contigo una bolsa para recoger tus residuos y no dejar rastro de tu paso por la playa.
La Playa de la Francesa en La Graciosa es un auténtico paraíso que te espera para ser descubierto. Sus aguas cristalinas, su arena dorada y su entorno natural te cautivarán desde el primer momento. No pierdas la oportunidad de visitar este rincón único y disfrutar de la tranquilidad y la belleza que ofrece. ¡Te aseguro que no te arrepentirás!